jueves, octubre 6

1ª EVALUACIÓN



LECCIÓN 2 : O SABER CIENTÍFICO. Pág. 36


1.2 La ciencia desde el Renacimiento(S. XV/XVI)  hasta hoy.

Repaso.

Composición de la Mente(: 

1.Razón propiamente dicha o inteligencia lógica.

2. Memoria.

3. Imaginación.

4.  Y a esto hoy nosotros añadiríamos las EMOCIONES.


   1, 2, 3, y 4 están muy vinculadas entre sí.

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Francis Bacon (1561 – 1626) fue la definición misma de un “hombre renacentista. Propuso la "Nueva Ciencia" con una dimensión o extensión más práctica. Es cierto que debemos conocer teóricamente cómo funciona, cuál es su estructura y las leyes que rigen  la realidad pero aportando pruebas o experimentos. Teoría sí pero para aplicar esos conocimientos para dominar y transformar la naturaleza  en nuestro beneficio .

Para que la poderosa Razón pueda hacer eso  de la forma más eficaz posible debemos primero diagnosticar los prejuicios o "IDOLA" o nociones falsas que nublan  nuestra razón o entendimiento y no le permiten avanzar en el camino del verdadero conocimiento:

“Hay cuatro clases de ídolos que asedian la mente del hombre. Ídolos de la Tribu, Ídolos de la Cueva, Ídolos del Mercado e Ídolos del Teatro.

1. “Los Ídolos de la Tribu tienen su origen en la naturaleza humana misma. Propia de la especie humana( la tribu ó raza),  porque es una falsedad que el hombre sea la medida de las cosas.(la realidad no se adapta a nosotros).  El entendimiento humano es como un espejo imperfecto que recibe la luz de la realidad y la  distorsiona y decolora l mezclando su propia esencia con ellas. ES DECIR IDENTIFICA LO QUE YO VEO Y PIENSO CON LA REALIDAD.

 Por ejemplo la tendencia a considerar correctas las explicaciones que concuerdan con nuestros deseos y opiniones y rechazar las que están en contra.

Otro ejemplo es que el intelecto humano por su estructura misma se ve empujado a suponer que en las cosas existe un mayor orden que el que poseen en realidad.  A veces el  intelecto  se imagina paralelismos, correspondencias y relaciones que en realidad no existen O NO TENEMOS PRUEBAS DE ELLO. Dicho de otra manera la imaginación no necesita pruebas y la razón no las pide.

2. “Los Ídolos de la Cueva o Caverna son los ídolos del individuo: ya que cada hombre tiene una cueva donde vive y en donde distorsiona la naturaleza de acuerdo a sus propensiones, a su educación, sus conversaciones y lecturas, y las impresiones que causan las cosas en él en diferentes momentos.  El espíritu de los individuos es diverso y mudable, y resulta casi fortuito.Por ello, escribe Bacon, Heráclito no se equivocaba al afirmar "Los hombres van a buscar las ciencias en sus pequeños mundos, no en el mundo más grande, idéntico para todos". Los ídolos de la cueva, por lo tanto, tienen [...] su origen en la naturaleza particular del alma y del cuerpo del individuo, de la educación y de los hábitos de éste, o de otros azares fortuitos. Puede suceder, por ejemplo, que algunos se aficionen a sus especulaciones particulares porque se crean autores o descubridores de ellas, o porque hayan colocado en ellas todo su ingenio y se hallan acostumbrados a ellas. También es posible que, basándose en un trozo de saber construido por ellos, lleguen a extrapolarlo, proponiendo sistemas filosóficos completamente fantásticos [...].  Asimismo, hay otros que se ven dominados por la admiración hacia la antigüedad, y otros, por el amor y el atractivo de la novedad; escasos son los que se arriesgan a defender un camino intermedio, sin despreciar lo que haya de adecuado en la doctrina de los antiguos, sin condenar lo que los modernos hayan acertadamente descubierto.

“Están también los Ídolos del Mercado: las preconcepciones formadas por medio de la interacción entre los hombres cuando hacen comercio e intercambian ideas. Porque es por medio del discurso que el hombre va haciendo asociaciones, y en muchos casos las palabras se imponen en la mente de acuerdo a criterios vulgares. Así, cada palabra mal empleada va obstruyendo el entendimiento. Aunque algunos cuantos quieran hacer definiciones y explicaciones minuciosas, la avalancha de palabras simplemente fuerza y hace violencia al entendimiento, confundiéndolo y llevándolo a interminables fantasías e ideas vacuas.

“Por último, los Ídolos del Teatro son aquellos que han asentado sus reales en la mente del hombre, provenientes de dogmas y de falsas reglas de demostración. Los llamo ídolos del teatro porque considero que los sistemas de pensamiento que recibimos sin más, no son sino representaciones teatrales, que no hacen sino mostrar mundos de su propia creación, irreales y cautivantes. Así hay incontables principios y  axiomas que por tradición, credulidad y negligencia se han perpetuado.

“De estos cuatro ídolos debe hablarse extensamente, de modo que el entendimiento pueda prevenirse:

“El entendimiento, por su propia naturaleza tiende a suponer la existencia de más orden del que de hecho encuentra en el mundo. Incluso cuando encuentra algo sin orden, se apresura a inventar razones y paralelismos; justificaciones que no existen. Y una vez que ha adoptado una opinión (ya sea recibida o inventada por él mismo), se dedica con todo ahínco a tomar todo cuanto halla y organizarlo en soporte de tal opinión.

“El entendimiento no es un objeto frío y aislado, sino que recibe influencias de la voluntad y los afectos; de aquí nace el hecho de que queremos “ciencias como las deseamos.” Si su emoción de por sí se inclina a cualquier pensamiento, le será más fácil creerlo como hecho. Así rechazará las dificultades por su impaciencia; la sobriedad por estrechar sus esperanzas; las explicaciones más profundas por su apego a la superstición; y la frialdad de los hechos debido a su orgullo.

“Que todo estudiante de la naturaleza tome este consejo: que debe de sospechar de cualquier cosa con la que su mente guste de acomodarse con placer, y que más cuidado aún debe de tener al sopesar cuestiones en las que el entendimiento debe permanecer claro y ecuánime al afrontarlas.”












Apuntes desde pág. 42 hasta 49 ambos inclusive.